lunes, 29 de febrero de 2016

Exhibición ecuestre en el festejo de rejones de la Feria de la Magdalena

Ficha:

Rejones. Media entrada. Tarde fría

Toros de Castillejo de Huebra, desiguales en juego

Andy Cartagena (oreja) , Sergio Galán (Silencio), Joao Maura hijo (oreja), Leonardo Hernandez (oreja), Manuel Manzanares (Saludos),  Lea Vicens (saludos).

Incidencias: 

En el cuarto de la tarde salto al ruedo un indocumentado anti con un cartel.


Tarde fría en el tendido, en el ruedo los rejoneadores gustaron al público exhibiendo sus cuadras y haciendo una exhibición ecuestre, más que un toreo de rejoneo.

Lo mejor de la tarde lo dejaron Andy, Joao y Moura los cuales obtuvieron una oreja cada uno,  A Manzanares el toro le toco todos los caballos que saltaron al ruedo, algunos haciéndoles perder la estabilidad. Galán poco pudo lucirse ante el toro más flojo del encierro que pronto se rajo.

La expectación de la tarde era la joven rejoneadora Lea Vicens, que fue ovacionada en el paseillo y a la hora de lidiar su toro, no defraudo aunque acuso su falta experiencia, pero dejo pinceladas buenas.













































Grande Varea en la encerrona que abrió la Feria de la Magdalena

Ficha:

Castellón, domingo 28 de febrero del 2016. Novillos de “Fuente Ymbro” (1º, 4º y 6º) y “El Parralejo” (2º, 3º y 5º) justos de presentación. Manso bueno el segundo y bueno el quinto, premiado con la vuelta al ruedo. 

Jonathan Varea como único espada: Oreja tras aviso, ovación con saludos tras aviso, silencio tras aviso, oreja con petición de la segunda, dos orejas y silencio. 

Entrada: Más de tres cuartos.

Domingo 28 de Febrero. Fecha que no se le olvidará al novillero de Almazora Jonathan Varea. La ansiada encerrona en el coliseo de la calle Pérez Galdós había llegado. Importantes críticos taurinos como José Luís Benlloch y empresarios del calibre de Simón Casas o Martínez Erice tampoco se querían perder la tarde de torería y gusto con la que nos iba a deleitar el diestro castellonense. Entre un gran  ajetreo y empujones apareció Varea vestido de caña y azabache, con un rostro serio que reflejaba la importancia de la tarde y la responsabilidad que ello con llevaba. Además de una gran entrada, hacía tiempo que no veíamos en una novillada con picadores más de tres cuartos del coso.

Cuando el reloj marco las 5 en punto de la tarde, presidente asomó el pañuelo blanco con el que daba comienzo el festejo que será recordado por todos los espectadores presentes.
Al final del paseíllo, sonó una fuerte ovación la cual obligo a Varea a saludar. Y salió el primero de la tarde de nombre “Pelicano” marcado con el número 35 del hierro de “Fuente Ymbro” al cual recibió con una larga cambiada seguida de unas verónicas poco lucidas, ya que el utrero salía suelto. En la muleta lo recibió por debajo para poder al animal, seguido de dos series con la mano derecha bajándole la mano donde se pudo gustar e incluso abandonar. Cambió de mano  y comenzó a torear al natural con la mano muy baja, el novillo tenía mucha calidad pero le faltaba casta y empuje cosa que le impidió a Varea apretarlo. Mató de estocada trasera. Oreja.

Con la primera oreja en el bolsillo, el de Almazora salió entregado al segundo de la tarde de nombre “Actor” marcado con el número 24 del hierro de “El Parralejo”. Recibió por cordobinas y toreo caro de verónicas con una media de remate abelmontada. Pudimos ver dos quites, uno por templadas verónicas y otro por arrebatadas chicuelinas. El utrero metía bien la cabeza pero hizo cosas de manso en el caballo y en las banderillas, pero la suerte estuvo en que se convirtió en el mansito bueno. En la muleta comenzó con pases por alto, seguido de una serie con la derecha a media altura por la falta de fuerzas del novillo. Siguió con una gran serie de rodillas asentado en sus riñones y templando la embestida cosa que provocó la alegría y la pasión en las gradas. Remato con  poncinas y una extraordinaria trincherilla. Se esfumaron las dos orejas por culpa del acero. Aplausos en el arrastre y aplausos para el torero.

Salió el tercero y tanto el público como Varea tenían la mente en el utrero anterior. No sirvió en de Fuente Ymbro, solo podemos destacar los momentos dramáticos que observamos en el tercio de varas, en el cual cogió feamente a un monosabio, que ni se miró y siguió con su tarea. El castellonense lo pasaporto con buen gusto. Falló otra vez con el acero.
Salió en cuarto lugar un utrero colorado de Ricardo Gallardo, con movilidad y entrega pero sufrió una voltereta después dl tercio de varas que la acuso en la muleta. Bien el novillero en la faena de muleta por los dos pitones pero comenzó a pararse el de Ricardo, remató con unos redondos y estocada. Oreja.

Y salió el bueno de la novillada, de nombre “Juaco”, número 2 del hierro de “El Parralejo” de 463 kg. El saludo de capote fueron verónicas con rodillas al suelo muy templadas. Pudimos ver el mejor tercio de varas de la tarde. Quite por medias y una revolera final. El de Almazora nos sorprendió banderilleando, saliendo del paso con los dos primeros pares, pero llegó la inspiración en el tercero, un par al quiebro magnifico donde se sintió el aroma de la Plaza Mayor de Almazora. Con el público totalmente entregado hincó las rodillas en tierra y se puso a torear de verdad, con los riñones encajados y en circular, serie que será recordada durante mucho tiempo, y de buena condición el novillo (aunque un punto mansito). Lo entendió muy bien Varea que lo toreo con armonía y compás, con temple y despaciosidad, encajando barbilla, en fin, toreo caro y el que nos gusta a cualquier aficionado. Rotundo con la espada. Rompió a llorar Varea, había conseguido el triunfo soñado ante su público. Dos Orejas y una excesiva vuelta al ruedo para el novillo.


Se fue a portagayola con el último, con la flor totalmente verde en su morrillo, lástima que no lo viera ya que salió limando las tablas, recibió con un farol rodilla en tierra, verónicas y una media que nos hizo recordar al mismísimo Rafael de Paula. Intentó un difícil quite por crinolinas, lástima que no le saliera con limpieza. En la muleta se pudo ver un novillo de calidad aunque sin trasmisión, con un novillero en su pleno auge, el cual toreó con las dos manos con calidad y buen gusto. Debido al pinchazo no pudo cortar la quinta oreja.